El dólar ganó terreno de cara a la apertura de Estados Unidos, pero cerró el día de forma mixta. El EUR y el CHF se mantienen sin cambios frente a su rival estadounidense, así como el JPY, mientras que las divisas vinculadas a las materias primas y la libra cotizan firmemente a la baja.
Las ventas minoristas de EE.UU. decepcionaron las expectativas, mientras que el IPP avanzó más de lo previsto, lo que apunta a nuevas presiones inflacionarias. La atención se centra ahora en la Reserva Federal de EE.UU., ya que el banco central anunciará su decisión sobre la política monetaria el miércoles y proporcionará nuevas proyecciones económicas.
El nerviosismo por el Brexit y la reapertura retrasada del Reino Unido continuaron afectando a la libra. Según los últimos datos, las importaciones irlandesas de Gran Bretaña cayeron más de un 20% en abril, profundizando la tendencia posterior al Brexit. El lunes, el Primer Ministro Boris Johnson confirmó que las restricciones actuales continuarían hasta el 19 de julio, y agregó que cree que no habrá más demoras, pero no descartó un escenario tan negativo. El GBP/USD cayó a un nuevo mínimo de 2 meses.
Wall Street cerró en números rojos después de que los índices europeos publicaran modestos avances intradía. Los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE.UU. se consolidan alrededor del cierre del lunes, con el rendimiento del bono a 10 años estable en torno al 1.50%.
El oro está bajo una presión leve, cotizando alrededor de 1.857$ la onza troy, el 38.2% de retroceso de su último movimiento alcista. Los precios del crudo reanudaron sus avances y el WTI se situó por encima de los 72.00$ el barril.
